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Delilah Copperspoon es una bruja aparecida en las expansiones de Dishonored, El Puñal de Dunwall y Las Brujas de Brigmore. Es la líder del aquelarre de Brigmore y desempeña el papel de antagonista en ambas expansiones, pese a que su relevancia es mucho mayor en la segunda.

Delilah es la figura en torno a la que gira la historia de las expansiones, ya que Daud, por consejo del Forastero, decide investigar el nombre y los planes de la misteriosa bruja.

Biografía

Presumiblemente nacida en Dunwall, Delilah trabajó como aprendiz de panadera en Dunwall Tower en su niñez, donde se hizo amiga de una joven Jessamine Kaldwin. Sin embargo, las dos amigas fueron descubiertas practicando actividades prohibidas (Posiblemente relacionadas con magia negra), y Delilah y su madre fueron expulsadas del palacio.

Más tarde, trabajó como aprendiz del eminente filósofo natural y artista Anton Sokolov, desarrollando sus habilidades de pintura y escultura.

En algún momento posterior a este aprendizaje, Delilah se vio involucrada en actividades de magia negra y captó la atención del Forastero, quien decidió otorgarle su Marca.

Con la magia negra de su parte, Delilah conformó una secta a la que se fueron uniendo seguidoras y sedujo al procurador Arnold Timsh, quien se encandiló de ella de tal manera que empezó a favorecerla con su dinero, llegando incluso a bautizar un barco, el Delilah, en su honor, así como a nombrarla heredera de su fortuna. Esto provocó serios problemas con su familia, en especial con su sobrina Thalia Timsh. SIn embargo, tras haberla nombrado heredera, Delilah desapareció, y el procurador vendió el Delilah a Bundry Rothwild, dueño del Matadero Rothwild.

Personalidad

Delilah es una bruja malvada y manipuladora. Es astuta, controladora y ruin, que no duda en dejar atrás a sus aliados para conseguir sus objetivos. También es planificadora, premeditada y detallista, tratando por todos los medios a su alcance de librarse de Daud y usurpar la identidad de Emily.

Asimismo, sus conocimientos de magia negra son vastos, y realiza sus mayores conjuros mediante obras de arte, como pinturas y esculturas, señal de su pasado. Sus retratos son conocidos en Dunwall, y mediante estos controlaba al procurador Timsh y pretendía poseer a Emily eternamente.

Apariencia

Delilah es parecida a sus secuaces del aquelarre, con la diferencia única de que viste de negro, y sus ropas, al parecer, antaño ropajes de aristócrata, están cubiertas de hojas y raíces, también lleva unas botas con tacones de color negras. Delilah lleva el pelo corto y una sombra de ojos muy marcada, así como color de labios negro, que parece ser natural. Es muy pálida y, pese a ser portadora de magia negra, no luce la Marca del Forastero en su mano.

El Puñal de Dunwall

Días después de haber asesinado a la Emperatriz, Daud se ve castigado con pesadillas en las que ve al Forastero y repite el asesinato.

El Forastero confirma que Jessamine no era como otros nobles que Daud hubiera matado antes, y le da la oportunidad de redimirse facilitándole el nombre de Delilah.

Buscando la redención, Daud empieza a investigar el nombre de Delilah, hasta que da con el barco del procurador y descubre la existencia de la bruja. En el apartamento del procurador Timsh, Delilah se comunica con Daud a través de una estatua que ella misma esculpió tiempo atrás, y por la que manipulaba a su presa.

Mientras tanto, Delilah consigue la cooperación de Billie Lurk, lugarteniente de Daud, para montar un complot que permitiría a Lurk acceder al liderazgo de Los Balleneros, con lo que Delilah podría ejecutar sus planes sin interferencias. Mediante la manipulación de ciertos mapas, Billie se las arregla para provocar el ataque de una hueste de decanos al Barrio Anegado, que toman la base de operaciones de Daud y matan a varios Balleneros. Sin embargo, el complot fracasa por mano del Puñal de Dunwall, que deja a los decanos sin organización y provoca su derrota. Tras ello, Billie se revela como traidora y Delilah, furiosa, aparece en persona y advierte a Daud que no interfiera en sus planes.

Las Brujas de Brigmore

Tras haber vencido a los decanos, Daud decide seguir investigando los misteriosos planes de Delilah. La bruja aparece varias veces en diferentes lugares a través de sus estatuas, con las que puede comunicarse con sus seguidoras.

Para alcanzar la Mansión Brigmore, donde se establece Delilah, Daud libera a la contrabandista Lizzy Stride de la Prisión de Coldridge para utilizar su embarcación, el Undine, y navegar por el Río Wrenhaven.

Al llegar a la Mansión, Daud atraviesa las numerosas defensas de Delilah para llegar hasta ella y frustrar sus planes, descubriendo que lo que pretende Delilah es corromper la mente de Emily Kaldwin para poseer su cuerpo para siempre y convertirse en la futura emperatriz. Delilah se encuentra en el Vacío, realizando su ritual con un retrato mágico de la niña, a través del que pretende actuar.

Allí, la bruja es derrotada por el asesino y desaparece. El liderazgo del aquelarre de Brigmore es presumiblemente tomado por otra bruja más tarde.

Independientemente del nivel de caos del jugador, Delilah se encontrará en el Vacío realizando su ritual de usurpación. Sin embargo, el jugador puede adoptar un estilo letal o no letal.

Vía letal

El jugador puede asesinar a Delilah antes de que su ritual sea llevado a cabo. Si la bruja ignora la presencia de Daud, es posible atacarla sigilosamente con cualquier arma que el jugador lleve encima. Sin embargo, si se ataca a Delilah (Sigilosamente o no), su cuerpo desaparecerá y se teletransportará por todo el escenario atacando a Daud, con lo que el jugador deberá vencerla varias veces.

Cuando Delilah se haya debilitado, se apoyará en el retrato mágico de Emily. El jugador, entonces, puede matarla con cualquier arma que tenga a mano. Si el jugador la ataca con su espada, se llevará a cabo la cámara de muerte de la bruja. Dicho movimiento consiste en que Daud hiere gravemente a Delilah hundiéndole la espada en el torso, pero esta, ignorando las heridas, se acerca al asesino y le golpea en la cara. Tras ello, grita de furia, y Daud le hunde la espada en la boca. Delilah cae al suelo y muere.

Vía no letal

Para cumplimentar esta vía, el jugador debe encontrar un retrato localizado en una cabaña del Vacío y sustituirlo por el retrato mágico de Emily. De este modo, al completarse el ritual, el retrato absorberá a Delilah y esta quedará sellada en él, pero viva.

Si Delilah es consciente de la presencia del jugador, este sólo podrá dejarla inconsciente una vez que haya sido derrotada, mediante un dardo anestésico. Si Delilah no ha advertido la presencia del jugador, puede ser dejada inconsciente antes, con un dardo o estrangulándola. De este modo, Daud completará el ritual él mismo y el retrato sustituto absorberá a Delilah, pero esta habrá visto a Daud.

Si el jugador no quiere ser descubierto en ningún momento, debe cambiar el retrato sin que Delilah ni su estatua se den cuenta, cuando la bruja se vuelva hacia la mesa de ritual. A partir de ese punto, el jugador debe permanecer escondido hasta que Delilah complete el ritual, con lo que finalmente, confusa, será absorbida.

Combate

Delilah combatirá si el jugador revela su presencia de algún modo, como disparando un dardo anestésico. Su estilo de combate de la misma manera que las brujas de su secta, pero es mucho más fuerte. Al ser la bruja más poderosa del aquelarre, puede invocar varios brezos de sangre durante la batalla, teletransportarse y arrojar espinas a muy alta velocidad. También puede lanzar un aullido muy dañino que desequilibrará al jugador, y conjurar varias copias de sí misma. Estas copias, pese a ser fáciles de derrotar, son tan letales como ella.

En batalla, cada vez que las copias de Delilah sean vencidas, desaparecerán hasta que solo quede la verdadera, que se teletransportará y volverá a invocar sus copias. Deilah repetirá esta estrategia varias veces hasta ser derrotada, momento en el cual se apoyará en el retrato de Emily, debilitada.

Curiosidades

  • Delilah no parece sentir empatía por nadie, ni siquiera por sus propias brujas.
  • Pese a ser usuaria de magia negra e incluso afirmar que tiene la Marca del Forastero en su mano, no la luce.
  • A diferencia de las otras brujas de su aquelarre, la piel de Delilah no se torna de color verde en combate.
  • Delilah no solo controla a sus víctimas a través de pinturas y esculturas, si no que también se comunica con sus secuaces. En Draper's Ward, el jugador puede ver a una bruja fingiendo ser una mujer herida en las alcantarillas, lo que resulta ser una trampa. Si se ignora a la bruja que finge y se mira a través de la cerradura de una puerta, no muy lejos de la plataforma central, se puede ver a una bruja hablando con una estatua de Delilah.
  • Al parecer, solo los que hablen con las estatuas de Delilah podrán escuchar su voz y verlas moverse. Si una tercera persona asiste a una conversación entre la escultura y su interlocutor, solo verá a este hablando con una estatua.
  • Si el jugador espera a que Delilah complete su ritual con el retrato de Emily, podrá ver como la bruja, tras haber finalizado, atraviesa el retrato. Esto conlleva al fin de la partida, con lo que el jugador deberá reanudar su partida desde el último punto de guardado.

Apariciones

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